Expatriada
En el coche una canción empieza a sonar
el soundtrack perfecto para algo a punto de reventar.
¿quién será el primero en cantar?
- Soundtrack. División minúscula.
Escucho División Minúscula, tal como lo sugeriste. No pensaba que fuera punk, aunque debería haberlo imaginado. Me agrada. Pero aún no lo hago parte de mi. Abro el cuadernillo de las letras y las fotografías interiores me muestran la ciudad del mundo: puede ser Monterrey, puede ser Mérida, puede ser Tijuana, Oaxaca, Puebla, puede ser Juárez, podría ser Zacatecas. En realidad de noche, cualquier ciudad es La ciudad. Truculentas luces, parpadeantes neones, velocísimos besos. Oscuridad, penumbra, deslumbre, fenómenos comunes a las pasiones nocturnas, pasiones nocturnas citadinas.
Discrimino. No fue igual besarnos al lado de la carretera anochecida, que al filo de la escalerilla del autobús, que en la solidez de nuestra casa.
Nada es igual. Mucho menos sin tus besos. Nada es igual ni mejor sin ti.
La música me ocasiona un extrañamiento, imagino, similar al que tú sentías como extemporáneo. Yo no me siento de antes, es sólo que me siento de otro lado. Pienso en las manías de mis contemporáneos:
Ceso el ejercicio de escritura para pintarme las uñas. No es un ejercicio inspiracional, es sólo una llana perdida de tiempo.
Dejamos de hacer cosas importantes, apostamos a una pausa para hacer cualquier cosa inútil: mensajes sms, beber una coca cola, asomarnos a la calle, yo, pintándome las uñas. Acciones estúpidas.
Ahora escucho a las Jilguerillas, El rancho
a veces siento nostalgias
¿estaré enferma de nostalgia? Pero una nostalgia histórica, ancestral, incluso universal.
Añoro los días anteriores a la Conquista. Añoro la éra protozooica. Añoro nadar en el alma universal, sin cuerpo y sin conciencia.
Añoro los tiempos del charleston y del blues. Extraño tanto a José Alfredo Jiménez.
Ahhhhh
.
Es todo por este post.
ZAL.
Septiembre 14, 2006.
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